Rio Negro: STJ rechaza apelaciones y ratifica sentencia por crimen del sargento Huinchaqueo.
El Superior Tribunal de Justicia de Río Negro confirmó las absoluciones de Juan Rena y Martín Melgarejo, ambos acusados de participar en la emboscada y posterior homicidio del sargento Andrés Huinchaqueo. En el mismo fallo confirmaron las condenas de Darío Fernández y Julio César Fernández, condenados a 15 y 5 años de prisión respectivamente.
El máximo tribunal rionegrino, rechazó los recursos de casación que habían planteado la fiscalía y la parte querellante en relación a las absoluciones de Juan Rena y Martín Melgarejo, como así también el recurso intentado por el defensor de Darío Fernández. De ese modo, el máximo tribunal provincial, confirmó en diciembre pasado la sentencia que dictó la Cámara Primera del Crimen de Cipolletti. El hecho investigado ocurrió el 14 de octubre de 2011, cuando el miembro de la policía rionegrina había viajado desde Bariloche hasta el Alto Valle provincial, con el objeto de encontrarse con un sujeto con el que había mantenido contactos telefónicos y con el que había arribado a un acuerdo para comprarle un tractor. Con ese objetivo viajó a Cipolletti en un auto de alquiler y con una grúa que lo escoltaba para trasladar el vehículo de trabajo agrario. Roberto Lauraña era el tío de Huinchaqueo y relató ante los jueces del juicio lo poco que pudo ver, porque era de noche y tiene problemas de visión. Contó que en Bariloche alquilaron un auto y viajaron hasta Cipolletti, donde los esperaba José Pérez Bulacio, el dueño de la grúa que venía en viaje desde Bahía Blanca. Señaló que cerca de la terminal los esperaron dos personas en un auto blanco. Después tomaron la ruta 151 hasta una chacra en La Llanada. Allí caminaron por un callejón con otro hombre que los iba a guiar hasta donde estaba el tractor que Huinchaqueo pretendía comprar. Estaba oscuro y en medio apareció otro sujeto y les dijo «al piso, hijos de puta, que esto es un asalto». Enseguida abrió fuego y el que estaba con la víctima también disparó. El sargento intentó defenderse con su 9 milímetros pero la pistola falló. Como los delincuentes les exigían dinero, Lauraña le entregó «diez o veinte pesos que tenía en el bolsillo». Después escaparon corriendo. Huinchaqueo conservó el dinero que era para el tractor y antes de morir se lo entregó a su tío. Ya malherido fue trasladado en la grúa hasta la caminera y de allí al hospital, aunque no llegó con vida. En la misma sentencia que absolvió a Rena y Melgarejo y condenó a los Fernández, los jueces ordenaron seguir investigando para determinar quién más baleó a Huinchaqueo. Fuente: El Cordillerano